En memoria de Tharpa

CARTA DE DESPEDIDA DE MI AMIGA JUANA A THARPA, UN PERRITO PARA EL QUE HOY
NO LLEGAMOS A TIEMPO PARA SALVAR O COMO MINIMO DARLE UN DIGNO ULTIMO ADIOS.

UNA VICTIMA MAS DE UNA RESIDENCIA "MATAPERROS" CON FINES LUCRATIVOS SUBVENCIONADA CON NUESTROS DINEROS

...ADIOS THARPA ESTA CANCION ES DE MI PARTE, SIEMPRE TE RECORDARE, ME HAS
ENSEÑANDO TU CUERPO INERTE Y YA SIN VIDA Y ESTO ME SIRVE PARA SEGUIR
AHI ,DANDO OS VOZ Y DAR A CONOCER COMO APLICAN EN ESTE PAIS LA
LEGISLACION SOBRE LOS DERECHOS DE LOS ANIMALES !!ES TODO UNA FARSA!!


Ayer tarde me enteré que Tharpa estaba enfermo. Me dijo Alex (el propietario de la residencia) que llevaba dos días sin comer. Esta mañana llamé a la residencia para decir que iba a llamar a la clínica para que el veterinario pasara a recogerlo.
Me dijo su mujer que el veterinario..., para que?.
A lo que contesté que para que lo ingresaran y hacerle los analisis o pruebas necesarias para ponerle el tratamiento. Y si era necesario el suero mientras no comía.
Me dijo que no llamara a ningún veterianrio mientras no hablara primero con Alex. Que ellos en la residencia también tienen veterinario. (que hasta ahora no había hecho nada por Tharpa).
Entonces decido salir hacia Vinaroz para ver en que condiciones estaba Tharpa y yo misma llevarlo a la clinica. A mitad de camino llamo a la residencia para decirles que estoy de camino. La primera vez se corta la llamada, la segunda vez no me cogen el telefono. Diez minutos más tarde me llama Alex, le digo que estoy conduciendo hacía Vinaroz y me dice que Tharpa ya está muerto.
Le digo que igual voy, que me espere.

En esos momentos caí en una gran desolación. Sentí mucha pena por Tharpa. Por llegar tarde y no haber podido hacer más por él.
Me acordé del día que lo rescaté de la perrera y con la ilusión que lo llevé a la residencia pensando que estaria alli por poco tiempo hasta encontrarle una familia adoptiva.

Me acuerdo de lo avispado y curioso que estaba dentro del transportin mirando por la rejilla y
preguntandose: que pasa... a dónde me llevan ahora?.
Ya en la jaula de la residencia Tharpa era un ser lleno de vida, un ser instintivo que emanaba vitalidad y energía a raudales.

Por eso hoy cuando llegué a su jaula y lo ví inerte en el suelo con su cuerpo esqueletico y sus ojos apagados...
Sentí que me inundaba una enorme frustracion...
Por esos años que has pasado encerrado esperando que surgiera tu oportunidad para ser adoptado. Y que nunca llegó.
Por tu aspecto te calificaron de "perro peligroso". Aunque no te llegó a diagnosticar ningún especialista o etólogo y no recibiste terapia.
Ni siquiera te sacaron a pasear ni un sólo dia. Aunque Alex si que entraba dentro de tu jaula a ponerte la comida y a limpiarte..., no se preocupaba de sacarte ni de darte ningún tipo de afecto.

Hoy por fin saliste Tharpa, te fuiste al otro lado.
pero antes me dejaste un mensaje que he de transmitir:

A los que me quisiteis: ya no sufrais por mi, porque yo ya tampoco sufro más.

Muchas gracias a los que alguna vez me dedicasteis una mirada amorosa y compasiva,

Muchas gracias a quienes hicisteis lo posible por darme un destino mejor,
e imaginasteis para mi una vida feliz dónde recuperar la confianza en mis compañeros de existencia "los humanos".

Muchas gracias a Iratxe por tu gran corazón y generosidad, por pagar cada mes sin rechistar mi residencia
con la esperanza de que "algún día por fin me sacariais para llevarme a un sitio mejor".
Aunque..., no pudo ser.

También quiero decir:

Muchas "de nadas" a quienes me maltrataron y abandonaron

Muchas "de nadas" a quienes me miraron con desprecio por mi aspecto, sin pararse a pensar que sólo era un perro asustado

Muchas "de nadas" a los que sin ningún conocimiento me sentenciaron, sin darme oportunidad de recuperarme y conocer lo que es una caricia y como se siente un perro querido por su dueño.

Muchas "no se merecen" a quienes sin haberme visto ni visitado nunca, eran capaces de eutanasiarme (cuando estaba pletórico de salud). Sólo porque alguien sin cualificación dijo que yo tenia mal caracter y podía ser peligroso.

Muchas "no hay de qué" a Alex, el dueño de la residencia donde pasé mis últimos años de vida.
Por su forma de mirarme, tratarme e insultarme,
por desear mi muerte y decir tantas veces incluso después de muerto, que yo no merecia vivir.

Pero en mi defensa sólo quiero hacer constar que YO NO HE MORDIDO NUNCA A NADIE.
Y me voy en paz.



Mi querido Tharpa, perdoname por no estar más pendiente de ti.
Lo siento de verdad, pero no pude hacerlo mejor...

Mi querido Tharpa, siempre tendrás un lugar en mi corazón.
Y cuando yo me vaya, esperame al otro lado para darte el abrazo que no te di.


Juana Torres Moreno